La adicción es una forma de buscar satisfacción en algo externo a nosotros. Es la “solución” al rencor contra el mundo por no cumplir nuestros deseos o la incapacidad de querernos a nosotros mismos.
En general, es el miedo el que sustenta a todas las adicciones.
La forma más utilizada para enmascarar el miedo es mediante una adicción, ya sea alcohol, droga, tabaco, bulimia, obesidad, sexo, etc. porque las adicciones suprimen las emociones y de esa manera el adicto no siente su dolor.
La adicción nos frena y nos inyecta pereza para evitar seguir buscando las respuestas
a nuestros miedos.
Hay adicciones sociales, como adicción al trabajo, a saber (leer mucho “para saber más” o hacer muchos cursos o carreras), a acumular riquezas, y las adicciones patológicas
El consumo de cualquier sustancia lo único que hace es comprar el billete hacia un lugar fantástico donde todo es felicidad, no hay problemas, ni violencia, ni maltrato, ni indiferencia, ni abusos, ni esclavitud empresarial, ni exclusión, ni discriminación…
Todo este mundo fantástico se experimenta SÓLO la primera vez que se consume. Y luego se sigue consumiendo porque en realidad se está buscando repetir la primera experiencia, pero nunca se logra. Simplemente porque para el cuerpo es algo “novedoso” sólo la primera vez.
Una de las causas de la drogadicción es la huída de los conflictos, sin embargo
la auténtica causa es la gran necesidad de sentirse amado.
El consumidor no toma conciencia que cuando más se drogue más rechazado se sentirá por parte de su familia, amigos y conocidos.
En realidad, los demás están rechazando a
una “persona desconocida” porque la droga le ha causado tantos trastornos en su personalidad que no es la misma persona que conocían antes de comenzar a drogarse.
El drogadicto tiene avidez de amor esa es la razón por la que Reiki puede ayudar al adicto.
Reiki es un medio que permite ocuparse de él desde el corazón, dándole y enseñándole el amor que está buscando. Al mismo tiempo le irá reduciendo el Ego que es el causante de que esa persona necesite un reconocimiento permanente, que lo llevan a cometer actos de violencia, disturbios, perturbar las relaciones familiares… para llamar la atención.
El que esconde su dolor detrás del alcohol está mostrando que no quiere hacer ningún esfuerzo en enfrentar los conflictos de la vida y resolverlos. Cosa que tenemos que hacer todos los habitantes del Planeta.
Adormece con alcohol todos sus problemas y se sumerge en un mundo sano, feliz, hermanado…inexistente.
El alcohol quita las inhibiciones, hace desaparecer las diferencias sociales y raciales, en poco minutos todos se sienten “hermanos” pero pasados los efectos etílicos la angustia les invade
porque se dan cuenta que todo era una farsa. Un ensayo de la obra:”Así me gustaría que fuese la vida”
Reiki ha demostrado con las personas que se alcoholizan cómo puede hacerlos bajar a la Tierra y tomar conciencia que se puede cambiar la forma de pensar y ver el día a día.
Les da una visión más clara de los acontecimientos y les infunde valor, les reduce el miedo.
Dios no manda cosas imposibles, sino que,
al mandar lo que manda,
te invita a hacer lo que puedas y pedir lo que no puedas
y te ayuda
para que puedas.
SAN AGUSTIN